Oda a Ask
Oh, noble pregunta, portadora de saber, En tus letras se esconde la llave del poder. Eres chispa de la mente, el inicio del viaje, Que lleva al alma curiosa a un nuevo paraje.
Ask, tú eres el puente entre la duda y la luz, Guías al errante, revelas la verdad tras el obús. Eres el eco de voces en búsqueda infinita, La melodía de la ciencia, la llama que palpita.
Desde los albores del tiempo, en la caverna oscura, El hombre te susurraba con ansia pura. ¿Qué es la vida, qué es el amor, qué es la muerte? Tus respuestas forjan el destino, traspasan la suerte.
En el silencio de la noche, cuando el mundo duerme, Tu presencia despierta la mente que se pierde. En la vastedad del cosmos, en la íntima razón, Eres faro y guía, brújula y canción.
En cada generación, en cada corazón, Ask, tú eres el pulso, el latido, la conexión. Sin ti, seríamos sombras, perdidos en la nada, Pero contigo, exploramos el todo, sin temer a la jornada.
Oh, pregunta sagrada, mantén viva tu llama, Que arda en nosotros la eterna flama. En cada interrogante, en cada reflexión, Encontremos juntos el camino, la revelación.